El jueves, el índice de divisas de EE. UU., que refleja su actitud hacia los competidores, subió un 0,1% después de subir a un máximo de 3 años antes. A pesar de este factor disuasorio, los precios del oro continuaron con la tendencia alcista iniciada el día anterior.

El último día de junio fue bastante favorable para el activo amarillo, a diferencia de todo el mes, que resultó ser el peor desde abril de 2013. El miércoles, las cotizaciones subieron un 0,5%.

El aumento de ayer del oro fue del 0,3%, o 5,20 dólares. Al cierre del New York Comex Exchange, el principal metal precioso se cotizaba a $1776,80.

El principal trampolín de cotizaciones en los últimos días es la tensa situación epidemiológica en el mundo. El aumento de la incidencia del coronavirus en varios países, así como la propagación activa de la nueva cepa delta, preocupan a los inversores.

El endurecimiento de las medidas de cuarentena puede conducir nuevamente a una disminución de la actividad económica, lo que a su vez afectará favorablemente el precio del oro como activo refugio.

Según el analista senior de Kitco.com, Jim Wyckoff, el crecimiento del activo amarillo el jueves también se debió al cierre de posiciones cortas en los mercados de futuros y compras masivas.

Su colega Fawad Razaqzada de ThinkMarkets cree que el oro ahora está significativamente infravalorado. Apoya su opinión con el hecho de que otros activos importantes logran mantener parcialmente sus posiciones logradas en el contexto de las medidas de incentivo.

En contraste con ellos, el principal metal precioso en junio no pudo resistir la presión provocada por los rumores sobre un recorte antes de lo esperado de la política monetaria blanda de la Fed y una posible subida de tasas de interés.

Anteriormente, las previsiones de los expertos para el oro en el tercer trimestre eran optimistas. Esperaban que los precios del activo amarillo registraran una tendencia alcista. Ahora, cuando el rendimiento de los bonos estadounidenses se ha fijado con seguridad en el 1,50%, su posición ha cambiado.

Razaqzada señala que el estado de ánimo positivo del oro puede ser fácilmente reprimido tanto por un aumento en la rentabilidad como por la inminente reducción de las medidas de estímulo.

Mientras tanto, el viernes por la mañana, el precio del metal precioso ha seguido creciendo. Sin embargo, las cotizaciones muestran una dinámica insignificante en el contexto de la falta de noticias significativas.

En el momento de la preparación de este material, el oro se cotizaba a $1778.,3. La diferencia con el cierre del jueves fue de $1,95 o 0,09%.

El precio de la plata también varió ligeramente al alza. En comparación con el valor final de ayer, el activo aumentó un 0,07%. Por la mañana, su precio llegó a $26,183.

La imagen del mercado actual de metales preciosos depende de la publicación de estadísticas del mercado laboral estadounidense. Según los expertos, los datos deberían ser positivos.

Se espera que en el primer mes de verano, el desempleo disminuya un 0,1% y ascienda al 5,7%. Los analistas también predicen un aumento en el número de puestos de trabajo en los sectores no agrícolas de la economía estadounidense. Según estimaciones preliminares, su número aumentó en 700 mil después de un aumento de 559 mil en mayo.