La economía del Reino Unido sigue deprimida. Su crecimiento económico continúa desacelerándose como se esperaba. La razón principal, como sabemos, es la pandemia de coronavirus y las medidas de confinamiento relacionadas. Además, la disputa en curso con la Unión Europea sobre un acuerdo comercial añade más leña al fuego. La economía británica se contrajo nuevamente en mayo, pero a un ritmo mucho más lento que en abril. En base a estos datos, Chris Williamson, economista jefe de negocios de IHS Markit, predice un repunte en junio, ya que se han aliviado algunas restricciones relacionadas con la pandemia. "Sin embargo, parece que el Reino Unido sufrirá una recuperación frustrantemente lenta, dado el ritmo más lento de apertura de la economía en relación con otros países que han tenido menos casos de COVID-19", dijo Williamson. A la luz de esto, se espera que el Banco de Inglaterra reduzca sus tasas de interés por debajo de cero en un futuro próximo. El gobernador del Banco de Inglaterra, Andrew Bailey, señaló que se oponía menos a las tasas de interés negativas que antes de la escalada de la crisis del coronavirus.