Algo bastante curioso ha ocurrido recientemente en los Estados Unidos. El Servicio de Impuestos Internos pagó casi $1.4 mil millones en cheques de estímulo a personas fallecidas. Según un informe de la Oficina de Responsabilidad del Gobierno, esto se debió principalmente a una carrera para inyectar dinero en la economía.

Por lo tanto, una gran parte del dinero fue a pasar a lugares equivocados ya que la administración no consultó los registros de defunción para asegurarse de que las personas fallecidas no recibieran fondos. "Las agencias enfrentaron dificultades para realizar pagos a algunas personas y enfrentaron riesgos adicionales relacionados con la realización de pagos indebidos a personas no elegibles, como fallecidos y personas falsas", se lee en el informe. Tal error ya ha sucedido antes. Durante la crisis financiera de 2008, miles de beneficiarios del Seguro Social fallecidos también recibieron cheques de estímulo. Curiosamente, es poco probable que el Servicio de Impuestos Internos niegue legalmente los pagos a las personas que presentaron sus declaraciones de impuestos en 2018 o 2019, incluso si ahora están muertos.

En general, desde el levantamiento de las restricciones de cuarentena, la economía estadounidense se está recuperando. Es por eso que el gobierno está cancelando gradualmente los beneficios para los estadounidenses que están temporalmente sin trabajo. "Estamos reabriendo y las empresas están volviendo. Y, por lo tanto, los trabajos están regresando", dijo Larry Kudlow, asesor económico de la Casa Blanca. El monto actual del seguro de desempleo es de $600 por semana.