Varios gigantes de la industria financiera estadounidense y mundial informaron una caída en los ingresos netos del tercer trimestre. Entre los "afortunados" se encontraban Citigroup y Wells Fargo, así como líderes del mercado como JPMorgan Chase y Bank of America.

Esa caída en las ganancias reflejó la imagen de cómo la pandemia de coronavirus pesó sobre el sector financiero de Estados Unidos, Citigroup y Wells Fargo, el tercer y cuarto banco más grande de EE. UU. Por activos totales, respectivamente, reportaron una caída del 60% en sus ingresos respecto al año anterior. JPMorgan Chase y Bank of America, que ocupan el primer y segundo lugar en activos respectivamente, registraron una caída del 30% en los ingresos netos. Según los expertos, la estrategia actual de la Fed contribuyó a un descenso tan rápido de los rendimientos. "Tiene un crecimiento crediticio suave y todavía siente el impacto de las acciones agresivas de la Fed a principios de este año", dijo el analista Jason Goldberg de Barclays Bank. De hecho, la situación es un poco extraña. La demanda de préstamos bancarios es bastante alta. Además, los prestamistas no adoptaron provisiones excesivas para pérdidas crediticias esperadas en el tercer trimestre como lo hicieron en el primer y segundo trimestre. Sin embargo, sus beneficios siguen cayendo. Se espera que incluso bancos de inversión como Goldman Sachs Group y Morgan Stanley, centrados principalmente en los mercados de capital, informen caídas en las ganancias del tercer trimestre de alrededor del 5% al 10%.

La Fed no tiene planes inmediatos para realizar cambios drásticos en su política monetaria. Esto significa que, en el último trimestre de 2020, la industria financiera estadounidense puede sufrir pérdidas aún mayores que en el tercero. La tasa clave de la Fed se encuentra actualmente en un mínimo histórico del 0,25%, mientras que hace apenas un año era del 2,25%.