Los expertos advierten que es probable que el aumento de los precios del gas en la Unión Europea ejerza presión sobre la industria química, la producción de hidrógeno azul y las empresas siderúrgicas de la región.

El 15 de septiembre, el precio al contado del gas natural en el mercado de futuros de la UE superó el 20%, alcanzando los $950 por 1,0000 metros cúbicos por primera vez en la historia. Desde finales de abril de 2021, los precios del gas natural han ido subiendo sin parar. En particular, a principios de septiembre, los precios se dispararon 1,5 veces.

Es más, los altos precios del gas también perjudican el atractivo de mercado de las empresas de varios sectores; por ejemplo, la producción de fertilizantes nitrogenados y productos químicos gaseosos. Anteriormente, estas industrias no podían competir en términos de costos con las de Estados Unidos, Rusia y los países de Oriente Medio, donde el gas es más barato que en la UE.

"La fuerte subida actual de los precios del gas afecta inmediata y necesariamente a las industrias europeas intensivas en energía", dijo Mate Toth, jefe del Departamento de Proyectos de Energía de FinExpertiza. Por lo tanto, puede conducir a un aumento en el costo de la producción de electricidad y calefacción, especialmente en las centrales eléctricas de gas.

"Dondequiera que haya una gran demanda de calefacción y energía, casi todas las empresas se verán afectadas indirectamente en la escena empresarial. Los sectores comerciales en Europa son los que tienen más probabilidades de verse afectados por los precios extremadamente altos del gas, donde incluso a corto plazo el aumento de precios afecta los costos de producción y servicio a través de refrigeración, calefacción, secado, iluminación, etc.", señaló Mate Toth. "La industria química, por ejemplo, las plantas de nitrógeno en Europa, también está expuesta a riesgos, así como la producción de hidrógeno, por ejemplo, en Alemania, donde no predomina el hidrógeno "verde" sino el azul, generado a partir del gas", añadió el experto.

También es probable que las empresas químicas y siderúrgicas de la UE enfrenten una baja demanda debido al aumento de los precios del gas. Teniendo en cuenta los precios actuales del carbón y la eliminación de desechos nocivos, el precio real del gas debe sumar $500 por cada 1,000 metros cúbicos o menos. Sin embargo, en el mercado al contado, el precio del gas es mucho más alto que el real. Ralentiza el reemplazo de plantas de carbón dañinas por plantas de energía neutra a gas. Como resultado, las plantas más ecológicas no pueden retener la competencia.