El mercado ya está prácticamente seguro de que la Fed pondrá fin al ciclo de subidas de las tasas de interés y comenzará a bajarlas la próxima primavera para apoyar la economía nacional. Las cifras de inflación publicadas el jueves permiten a los inversores contar con tal escenario.

Así, según los datos publicados, el índice de precios básicos de los gastos de consumo personal (PCE), así como los valores de los ingresos y gastos personales salieron al nivel de la previsión de consenso, mostrando una caída.

A raíz de esta noticia, los mercados de renta variable de Estados Unidos y Europa recibieron un notable apoyo. La principal razón de esta postura coordinada de los inversores es la persistente expectativa de que no sólo la Fed, sino también el BCE y otros bancos centrales europeos dejen de subir las tasas de interés. Tal señal, por ejemplo, se recibió de la publicación de los datos sobre la inflación al consumo en la eurozona. Los datos presentados de estadísticas económicas mostraron un mayor descenso de la inflación tanto en términos anuales como mensuales. Así, en términos interanuales, el índice de precios al consumo disminuyó del 2,4% al 2,9%, mientras que la previsión era de una disminución al 2,7%. En términos anuales, el indicador mostró una deflación en noviembre del -0,2%, frente a un ligero aumento del 0,1% en octubre.

Estos datos no sólo sirvieron de apoyo a los mercados europeos de renta variable, sino que también presionaron los rendimientos de la deuda pública local.

¿Deberíamos esperar que el par de divisas principales EURUSD baje debido a una caída de la inflación mayor de lo esperado en la eurozona?

Creemos que es probable que este descenso sea limitado, ya que la debilidad del dólar, cuando se pesa en balanzas virtuales, es en perspectiva más fuerte. Sí, por supuesto, con la economía europea cayendo en recesión y la estadounidense no, existe la posibilidad de que a medida que el IPC se acerque a la preciada marca del 2% y se estabilice cerca de ella, el BCE comience a recortar las tasas de interés y a introducir diversas medidas de estímulo. Pero si esto ejercerá una presión notable sobre el par EUR/USD, creemos que por ahora no será suficiente, ya que el dólar sigue estando en una posición más fuerte que el euro y ciertas perspectivas de que comiencen los recortes de las tasas de interés ya en la próxima primavera ejercerán una presión a la baja sobre los rendimientos de los bonos del Tesoro, y a través del fondo y sobre el tipo de cambio de la divisa estadounidense.

Lo más probable es que este estado de cosas lleve a la reanudación del crecimiento del par eurodólar hasta el máximo local de 1,1250 este verano.

En cuanto a la dinámica de hoy en los mercados, dependerá en gran medida del discurso anticipado del jefe del Sistema de la Reserva Federal J. Powell, de quien los operadores esperarán una reacción a las cifras de inflación presentadas ayer. Si al evaluarlas deja de hablar de la alta probabilidad de otra subida de las tasas y se muestra optimista al evaluar las perspectivas de la economía nacional, esto podría ser un fuerte estímulo para el crecimiento de la demanda de activos de riesgo, lo que dará lugar a una nueva ola de debilitamiento del dólar.

Previsión del día:

EUR/USD

El par se corrigió, como esperábamos, hasta 1,0880. Una fijación por encima de este nivel y un posible positivo de Powell podrían apoyar al par y estimular su crecimiento hacia 1,1015.

GBP/USD

El par también ha corregido hasta 1,2615. Al igual que el par EUR/USD, tiene todas las posibilidades de subir hasta 1,2740.