Muchos analistas han expresado su preocupación de que los problemas de la economía estadounidense puedan socavar las economías de muchos países. El principal problema ahora es la inflación vertiginosa, que puede frenar la recuperación constante de la economía mundial.

Es poco probable que los altos precios de energía, productos y servicios en los Estados Unidos disminuyan en el futuro cercano. Recientemente, la tasa de inflación de Estados Unidos ha alcanzado el nivel más alto en tres décadas. Los analistas están seguros de que alcanzará nuevos máximos.

En octubre de 2020, la inflación ascendió a 6,2% en términos anuales. En ese entonces, causó pánico entre los inversores. El Índice de Precios al Consumidor (IPC) ha estado subiendo por tercer mes consecutivo. Según los registros de los analistas, esto no ha sucedido desde la década de 1980.

El mercado de valores cayó fuertemente debido a los riesgos de inflación. El S&P 500 cayó un 0,82%, el Dow perdió un 0,66% y el NASDAQ Composite perdió un 1,66%.

Los expertos del mercado creen que las consecuencias negativas de la crisis del coronavirus son la principal razón de los altos precios al consumidor. Para mantener la estabilidad financiera, la Fed tuvo que lanzar el programa QE. Como resultado, la Fed inyectó $ 120 mil millones en la economía al mes y mantuvo la tasa de interés cerca de cero.

La crisis energética literalmente le ha añadido más leña al fuego. El aumento de los precios de la gasolina afectó negativamente al coste de muchos productos. "La inflación daña los bolsillos de los estadounidenses y revertir esta tendencia es una prioridad para mí", dijo el presidente Joe Biden en un comunicado.

Anteriormente, la Fed anunció una reducción gradual de las compras de activos. Reducirá las compras del Tesoro en $ 10 mil millones y los valores respaldados por hipotecas en $ 5 mil millones por mes. Los analistas esperan que esto pueda limitar la inflación. También creen que en la próxima reunión, programada para el 15 de diciembre, el regulador podría decidir recortar el volumen de compras de bonos del Tesoro entre 25,000 y 35,000 millones de dólares.

Además, el banco central está considerando una posible alza de tipos de interés. Ahora, la tasa de referencia está cerca del 0-0,25%. La Fed ha declarado más de una vez que mantendrá la tasa de interés cerca de cero hasta que se alcance el pleno empleo. Actualmente, las cifras del mercado laboral son bastante variadas.

Los inversores ahora están un poco confundidos. Suelen estar guiados por las decisiones del regulador. Si las perspectivas a largo plazo de la economía estadounidense se deterioran, es posible que aumenten las compras de activos de los países en desarrollo. Esta posibilidad preocupa a los analistas, quienes temen que la inflación en Estados Unidos se extienda a los mercados emergentes.