El presidente turco, Recep Tayyip Erdoğan, está batiendo récords en cuanto a la rotación de figuras clave del sistema financiero del país. En poco tiempo ha sustituido a varios responsables del banco central y a ministros de economía, el último de los cuales dimitió hace unos días.

El mejor amigo del pueblo turco y decidido luchador contra la inflación ha decidido un nuevo reemplazo para su equipo en medio de un nuevo colapso de la moneda nacional. Noureddin Nebati sustituye a Lutfi Elvan, antiguo responsable del Ministerio de Finanzas turco. El cambio de personajes en el gobierno sería la envidia de los guionistas de las series turcas. Nureddin Nebati fue anteriormente viceministro de Economía, pero ahora ocupa la silla de su jefe. Actualmente, todos los ciudadanos turcos saben que el presidente no se queda de brazos cruzados, sino que lucha activamente contra la inflación y la caída de la lira, sin escatimar en ministros y jefes de bancos centrales. Hay que recordar que Erdoğan había anunciado anteriormente la dimisión del gobernador del banco central del país, Murat Uysal.

No obstante, estos reajustes no salvan a la lira. La moneda está marcando nuevos mínimos, sin responder a los esfuerzos del presidente. El regulador local, al comentar lo que está ocurriendo, utiliza una redacción muy poco clara y lleva a cabo intervenciones directas en las divisas "debido a los precios poco favorables que se observan con respecto a los tipos de cambio". Como resultado de una "fijación de precios poco favorable", la lira ha caído de 7,43 a 13,71 por dólar desde principios de año y la inflación se ha acelerado del 14,6% a casi el 20% en el mismo periodo.