Los analistas de Bloomberg señalan que los principales bancos centrales y legisladores de la UE evitan utilizar el término "recesión" en sus declaraciones. Sin embargo, mientras sigan dando vueltas al asunto, los problemas actuales seguirán sin resolverse. La economía de la Unión Europea está bajo presión. Por un lado, la inflación amenaza con convertirse en recesión o estanflación. Por otro lado, las consecuencias negativas del conflicto ruso-ucraniano siguen planteando peligros. Bloomberg informa que la palabra "recesión" está fuera del vocabulario de los políticos europeos. Mientras tanto, persiste la amenaza de una recesión real. Además, las principales empresas de inversión y los principales inversores confirman los riesgos de una recesión económica. Según la agencia, las principales instituciones financieras como JPMorgan Chase, HSBC y Goldman Sachs ya han advertido sobre tiempos difíciles para la economía de la UE. Al mismo tiempo, la continua inflación galopante, el conflicto ruso-ucraniano y la actual crisis energética en la eurozona exacerban la situación. Bloomberg dice que las empresas europeas están dando señales de angustia en medio de una inflación récord y una obstinada restricción de la oferta, agravada por los estrictos confinamientos en China. Los inversores temen que la presión externa e interna lleve a la frágil economía europea a la recesión, concluye Bloomberg.