En algunos países, se cree que la responsabilidad del presidente y su administración es bastante limitada. Sin embargo, las cosas son diferentes en los Estados Unidos.

El fiscal general de Georgia, Christopher Carr, dijo que la administración de la Casa Blanca fue responsable de desestabilizar la seguridad energética de Estados Unidos. Carr se dirigió al secretario de Estado, al ministro del Interior y al ministro de Energía sobre la situación de los altos precios de los combustibles y la inflación. Acusó al presidente estadounidense Joe Biden de crear la crisis. Carr dijo que en lugar de admitir que su agenda climática estaba desestabilizando la seguridad energética del país, el presidente preferiría culpar al aumento de los precios de la gasolina en Rusia, la pandemia de coronavirus e incluso las compañías petroleras.

El fiscal general de Georgia recordó que Biden había cancelado el oleoducto Keystone XL, una instalación de infraestructura crítica que limitaba la producción de petróleo y gas, y había anunciado la prohibición del suministro de gas natural licuado ruso. “Las medidas temporales no resolverán el problema, y es por eso que pido a la administración de Biden que aumente e incentive de inmediato la producción de energía doméstica y proteja a los consumidores de los tiempos de volatilidad de los precios del gas hoy y en el futuro”, dijo Carr.